NUESTRO CRITERIO RESPECTO A LAS RELACIONES CON HOMBRES DE TIERRA.
No es posible realizar una síntesis de nuestra cultura actual sin correr el riesgo de que nuestras concepciones puedan parecer poco convincentes al no ir acompañadas de argumentaciones desarrolladas con la amplitud deseable.
Deseamos ofrecerle una panorámica superficial de las bases intelectuales de nuestra estructura social, en diferentes planos familiares a ustedes.
COSMOFILOSÓFICO
RELIGIOSO - MORAL
FÍSICO
Tal discriminación es artificiosa para nosotros que consideramos la urdimbre del cosmos como un “todo” armónico que no puede atomizarse en disciplinas o ciencias sin extorsionar gravemente la verdad. Las vinculaciones entre los distintos aspectos del universo son tan íntimas que su proyección mental en forma de compartimentos estancos puede resultar alienante para el estudioso.
Pero la trascripción de estas ideas se hace verdaderamente dificultosa si tienen ustedes en cuenta que los esquemas mentales de ustedes están conformados de distinta manera a los nuestros. No podemos utilizar un lenguaje común inteligible para ambos. Ahora mismo, al esforzarme yo para utilizar modismos verbales en español que sean familiares a usted, veto el flujo de ideas que de otro modo podría comunicar con soltura, pues las acepciones de sus fonemas no pueden interpretar correctamente mi pensamiento. ¿Podrían sus hermanos Rilke, Neruda, García Lorca haber expresado su exquisita sensibilidad con el sólo instrumento verbal de un vocabulario seleccionado en el índice de un manual de electrotecnia?
No se trata en nuestro caso de buscar un fonema o vocablo español cuyo significado sea análogo al de nuestra voz correspondiente. Es que aún conseguido ese primer caso, aún realizado un análisis lexicográfico completo del idioma, las expresiones complejas integradas por esas “palabras” esconderían significados insólitos para los hábitos tópicos del pensamiento terrestre. Por ello, las ideas que en estos informes han sido brindadas a otros hermanos suyos de diferentes nacionalidades, han de resultar necesariamente “geótropas”, es decir con marcado sabor a “orientación cultural terrestres”, pero ello es debido al vehículo de comunicación social escogido. El poder evocativo de los fonemas familiares a ustedes obstruye cualquier intento serio de transvase cultural exgeognosológico.
Muy distante de nuestra mente está la idea de ofrecerles estas concepciones para que sirvan como base doctrinal sustitutiva de los pilares del pensamiento actual terrestre.
Informes análogos a éste, aunque con un contenido específico distinto, fueron remitidos por vía postal a filósofos, jerarquías de distintas Iglesias, graduados de diversas universidades, técnicos, publicistas y personas con formación media de diferentes países de OYAGAA, (Tierra). A nosotros nos consta que muchos de sus hermanos despreciaron tales datos por negarse a reconocer nuestra verdadera identidad. Esta postura es ortodoxa desde un ángulo de “visión” de la lógica normal.
Pero aún aquellos OEMII terrestres que guardaron con incitante curiosidad estas páginas mecanografiadas en distintos idiomas, y que supieron combinar con equilibrio encomiable, la reserva mental y secreto que exigíamos, con una postura abierta de aceptación condicionada de nuestro testimonio, no fueron jamás coaccionados por nosotros para que sustituyesen sus propias ideas y concepciones geognosológicas por las nuestras.
No deseamos de ningún modo -incluso severamente les exhortamos- a que no caigan en la tentación de permutar sus ideas religiosas, cientifistas y político-económicas por las nuestras. Usted mismo reconocerá la razón de tal advertencia.
En primer razonamiento: porque nuestros informes son puramente DESCRIPTIVOS. Les ofrecemos un relato sin argumentos positivos, racionales y convincentes que lo apoyen.
Resultaría aberrante para ustedes que injertasen nuestras ideas, conceptos y afirmaciones desnudas, en la constelación ideológica conformada por sus educadores de TIERRA.
Pero es que además, si lo hiciesen así, extorsionarían ustedes gravemente el ritmo normal de convivencia social, el devenir de la cultura de TIERRA. Alterarían el proceso normal de la tecnología, dañando gravemente a la urdimbre geosocial actual.
Una revolución de sus estructuras ha de fraguarse en el seno de la propia red social. Una moral cósmica que nosotros compartimos, nos veda respetuosamente intervenir, salvo casos límite imprevisibles.
No venimos -al menos mis hermanos de UMMO- a traerles una nueva doctrina, a convertirnos en profetas bajados del cielo, de una nueva física, una nueva religión, unas concepciones matemáticas distintas, ofreciéndoles panaceas para sus males sociales o patofisiológicos, aprovechándonos de nuestra madurez cultural más avanzada. Como a un ingeniero especializado en construcciones de TIERRA, en una visita a una escuela de párvulos, no se le ocurriría extorsionar el ciclo de enseñanza infantil tratando de explicar a los UYIIE como se construye un puente en voladizo por medio de dovelas de hormigón pretensado.
Naturalmente ese especialista podría utilizar símiles y expresiones asequibles a estos cerebros embrionarios, que hiciesen comprensibles la tecnología que permite salvar grandes luces en la construcción de estas estructuras. No es necesario recalcar que una lección de esa naturaleza es inoportuna en un ciclo puerpedagógico.
La pureza de nuestra intencionalidad puede constatarse simplemente a través del procedimiento seleccionado para dirigirnos a ustedes. Si de veras pretendiésemos introyectarles nuestro propio mundo mental, ejercitaríamos nuestro proselitismo apoyando los textos con demostraciones, aunque fueran sofisticas. No insistiremos más en el hecho de que nuestra estancia en TIERRA se debe exclusivamente a una vital necesidad, que ustedes comprenderán, de estudiarles y analizar su evolución biocultural. Sólo cuando hemos comprendido que sus propias barreras de escepticismo nos protegen, decidimos este intento de simbiosis intelectual.
Les ofrecemos ahora estos documentos aun sabiendo que serán acogidos con reticencia y hacemos depositarios de ellos a hombres de TIERRA como usted, que impregnados por el interés hacia temas extrabiológicos, los conservarán al menos hasta que pruebas objetivas genuinas sancionen la autenticidad de su génesis.
Esto es lo único que postulamos: No nos crean. Acojan con desconfianza estos conceptos. No los divulguen por ahora en los medios de comunicación de masas. Muéstrense incluso escépticos ante los OEMII no familiarizados con su ciencia ( la que analiza estos hechos), pero no destruyan estas hojas impresas. Con algunos millares más distribuidos discretamente, constituyen el precedente histórico de las relaciones primigenias entre nuestras dos redes homínidas.